martes, 29 de noviembre de 2016

FORMAS DE MORIR, CHE GUEVARA Y FIDEL CASTRO


A veces el destino, el karma, las estrellas o vaya usted a saber, hace que algunas maneras de dejar este mundo sea mas épica y poética para unos que para otros.  La reciente muerte de Fidel Castro a los 90 años me hace pensar que la señora de la guadaña no fue muy benévola con él, al hacerle morir con una edad tan avanzada y llenos de achaques.  Lo más terrible, su estética era digna de lastima en los últimos meses.  Por el contrario el Che Guevara sí que cumplió con la leyenda al morir en la sierra de Bolivia, con un arma en las manos. ¡Qué contraste tan abismal entre estos dos personajes, en la forma y la manera de afrontar su destino con la muerte!


Mientras Fidel se erigía en un burócrata de la Revolución, El Che supo llevar la Revolución y la lucha hasta sus últimas consecuencias, algo que con todos sus innumerables errores, le honra.  Luego es más digna la figura mítica del Che, que la de un pobre anciano con un horrendo pijama, digo yo.

sábado, 19 de noviembre de 2016

FELIPE II Y EL KARMA


Después de leer la monumental biografía del historiador británico, Geoffrey Parker titulada Felipe II el Rey Imprudente, reflexiono sobre lo fructífero de su largo reinado.  Por supuesto no todo fue gloria para la nación española.  Aunque éramos respetados y lo más importante temidos, yo opino que sus cruentas guerras religiosas contra los herejes protestantes y calvinistas fue los más nefastos de su época.  Su determinación de imponer el catolicismo, a través de la espada del Duque de Alba en Los Países Bajos, fue un error estratégico que ocasionó la ruina económica.  Púes mantener un ejército de 60,000 soldados en aquellos lugares, resultaba una carga impositiva sobre el resto de los españoles.  Por no hablar de la plata y el oro, extraída de las minas de México y Peru, por esclavos africanos.  Todo este tesoro solo servía para alimentar un gran ejército y una desigual guerra religiosa, que no tenía fin.  La prioridad principal del Rey, hubiera sido más lógica aunar esfuerzo y destruir al Islam, conquistando Constantinopla y más tarde Jerusalén.
Otra cosa digna de censurar en su largo reinado, sería la infinita crueldad demostrada con la quema en la hoguera de cientos de herejes, que no eran católicos.  Durante su corto reinado en Inglaterra, al haberse casado con María Tudor, hizo mandar que murieran en la hoguera a 285 protestantes, de ellos cuarenta eran mujeres.  También la rebelión de los Moriscos en Granada se saldó con decenas de miles de muertos.  La guinda seria la ejecución en la horca de los condes, Egmont y Hornes, más mil rebeldes holandeses en 1568.  Tantas muertes inútiles en nombre de Cristo,para al final no poder luchar contra su propio destino, que era su muerte postrado en una cama.  Fue algo digno de misericordia,la manera como murio, para cualquier ser humano con algo de compasión.  

Los últimos días antes de morir fueron espantosos.  Púes tenía todo su cuerpo cubierto de llagas, qué despredían malos olores.  Sencillamente yacía en su lecho entre sus propios excrementos.  La forma en que murió me lleva a reflexionar sobre como el Karma, pone a cada ser humano, tanto si es rico, pobre o poderoso en su sitio.  La Historia está llena de casos de poderosos que murieron solo entre sangre y excremento, algo de lo que tenía que haber reflexionado este gran Rey.  Me pregunto cómo el Dios por el que tanto luchaba, le dejó morir de esa manera tan espantosa.  Luego la justicia divina del Karma es la única respuesta, digo yo.